No es nuestro objetivo alarmar a la población pero entendemos que los continuos robos acontecidos en nuestro pueblo nos hacen comprender la sensación de miedo e impotencia que sienten y sentimos los legorretarras ante tanto robo en domicilio, etc y que con este episodio del tiro ha llegado a un punto donde las instituciones, incluido el propio Ayuntamiento, tienen que reaccionar con firmeza.
"Dos menores residentes en Legorreta se encuentran ingresados en el Centro de Internamiento de Menores tras haber sido detenidos por la Ertzaintza y haber decretado el Juzgado de Menores su traslado a ese establecimiento. Es, de momento, el último episodio de una historia que comenzó el 31 de enero con un supuesto intento de homicidio y, casi una semana despues, parece guardar más relación con un robo presuntamente cometido por los dos menores y un posterior disparo accidental con un arma que formaba parte del botín.
Tal como relata el Departamento de Seguridad, el pasado domingo, 31 de enero, dos varones, menores de edad, se personaron en un bar de Legorreta demandando ayuda, ya que uno de ellos presentaba una herida sangrante a la altura del abdomen. Los allí presentes llamaron a los servicios de emergencia, que se desplazaron al lugar junto con recursos de la Ertzaintza. El herido, que presentaba una herida de bala con trayectoria de entrada y salida, fue trasladado al Hospital Donostia. Posteriormente se pudo conocer que su vida no corría peligro, al no encontrarse afectados órganos vitales, motivo por el cual fue dado de alta al día siguiente.
Dos hombres en un coche gris
En su declaración ante los agentes del Servicio de Investigación Criminal de la Ertzaintza en Gipuzkoa, encargados de la investigación, los menores manifestaron que, cuando se encontraban caminando por la vía pública en la localidad de Legorreta, se acercó hasta ellos un vehículo gris con dos ocupantes varones. Del vehículo se apeó quien ocupaba el puesto de copiloto y, sin mediar palabra, esgrimió un arma corta, realizando un disparo a corta distancia, huyendo seguidamente del lugar. Asimismo declararon desconocer la identidad del agresor.
Los agentes encargados de la investigación de lo que, a priori, parecía un intento de homicidio, observaron serias contradicciones entre las versiones aportadas por ambos, sospechando desde un principio de la posible falsedad de los hechos narrados.
Veinticuatro horas después del suceso, los investigadores localizaron, ocultos en un caserón abandonado, una serie de efectos, entre ellos dos televisores, diversas joyas y dos armas cortas, concretamente un revolver detonador y una pistola real del calibre 9mm corto. Los agentes lograron determinar que, en realidad, los dos menores eran los presuntos autores de un robo con fuerza, mediante fractura de una ventana, en el interior de una vivienda de la localidad, de donde sustrajeron los efectos hallados.
Una vez trasladado el material sustraído al caserón, donde fue localizado posteriormente por la Ertzaintza, el menor que resultó herido se encontraba manipulando el arma de fuego, cuando de manera accidental disparó la misma, con el resultado anteriormente mencionado.
Detención en Ordizia
En el momento de la inspección ocular realizada en el lugar del hecho fue localizada por los agentes una vaina percutida, posiblemente perteneciente al proyectil disparado.
Por todo ello se procedió a la detención de ambos menores, quienes, tras la práctica de las pertinentes diligencias, fueron puestos en libertad, siendo entregados a sus tutores.
Horas más tarde la Fiscalía de Menores de la Audiencia Provincial de Gipuzkoa citó a los menores para la toma de declaración. Sólo se presentó uno de ellos, encontrándose el segundo en paradero desconocido.
Ante esta incomparecencia, fue decretada una orden de detención sobre éste último. En la tarde del jueves día 4, agentes de la Ertzaintza de Oria procedieron a detener al citado menor, tras haber sido avistado caminando por el casco urbano de Ordizia, siendo puesto, posteriormente, a disposición de la Fiscalía de Menores.
Tras la práctica de diligencias, desde el Juzgado de Menores, fue decretado el ingreso de los dos menores en un Centro de Internamiento. Por otro lado, la Ertzaintza trata de establecer las circunstancias sobre la posesión del arma de fuego por parte del propietario de la vivienda y, en todo caso, establecer si se ha existido algún tipo de negligencia por parte de éste en cuanto a la seguridad en la custodia de la misma."
